viernes, 17 de junio de 2016

El Amor primario

Que las aguas del tiempo laven nuestros pies,
que cada día del resto de tu vida añores,
los ojos
las palabras
las caricias.

Yo, en mi juego, 
recuerdo,
la inmensidad de tu pecho,
la fuerza, 
el temblor de tu voz,
tu piel porosa,
el pelo abundante.

Memoria grabada
amor siniestro,
roto,
partido perdido.

Hoy el reflejo en el espejo 
me devuelve tu parecido
mi piel en tu piel
mis ojos como los tuyos
La sangre.

No somos lo mismo
por suerte
por desgracia

Con el pecho hundido
apreté los dientes
saqué la fuerza, esa, que me enseñaste
fui la que quisiste que sea
Y la noche se volvió dia
y ya nada volvió a ser como era

No olvido
ni perdono
ni comprendo
todo lo que te amo.