domingo, 27 de abril de 2008

Qué es que sé

Será el amor la memoria de los amores?
Las personas?,

digo, la suma de las historias?
Digo, la suma de cada mimo?
De cada beso?
De cada orgasmo?

Oh que será, que será!!??

martes, 22 de abril de 2008

Adios a los besos sin besar...

" Toco tu boca, con un dedo toco el borde de tu boca, voy dibujándola como si saliera de mi mano, como si por primera vez tu boca se entreabriera, y me basta cerrar los ojos para deshacerlo todo y recomenzar, hago nacer cada vez la boca que deseo, la boca que mi mano elige y te dibuja en la cara, una boca elegida entre todas, con soberana libertad elegida por mí para dibujarla con mi mano por tu cara, y que por un azar que no busco comprender coincide exactamente con tu boca que sonríe por debajo de la que mi mano te dibuja.

Me miras, de cerca me miras, cada vez más de cerca y entonces jugamos al cíclope, nos miramos cada vez más de cerca y nuestros ojos se agrandan, se acercan entre sí, se superponen y los cíclopes se miran, respirando confundidos, las bocas se encuentran y luchan tibiamente, mordiéndose con los labios, apoyando apenas la lengua en los dientes, jugando en sus recintos donde un aire pesado va y viene con un perfume viejo y un silencio. Entonces mis manos buscan hundirse en tu pelo, acariciar lentamente la profundidad de tu pelo mientras nos besamos como si tuviéramos la boca llena de flores o de peces, de movimientos vivos, de fragancia oscura. Y si nos mordemos el dolor es dulce, y si nos ahogamos en un breve y terrible absorber simultáneo del aliento, esa instantánea muerte es bella. Y hay una sola saliva y un solo sabor a fruta madura, y yo te siento temblar contra mí como una luna en el agua."

Cortazar, Julio. Rayuela. Capitulo 7

Día de nudos


Apareció, sin brazo, con una risa inexplicable. Tenía por qué reír?
Le dijeron que era una viva, casi sonaba a burla el comentario de esa vieja chota.
Con el brazo que le quedaba agarraba el pancho y eso era lo único que le importaba.
Ya no tenía cómo recoger las tarjetitas que, hacía minutos,había dejado en mi falda. Y yo, como una imbécil, estiré mi mano para que las agarre.
Me miró seria, como no se es a esa edad y me balanceó su cadera mostrándome el bolsillo de su pantalón.
Ahí puse la tarjetita y mi vergüenza.

miércoles, 16 de abril de 2008

Ni. (maldito genio)

Encerrada, ni miro cómo te estas yendo.
Ni se con cuánto, ni sí con una pata o con cuáles ojos.
Sin, tampoco, entender lo que no se puede explicar.
Sin, tampoco, pedir.
El silencio es lo que mejor me representa.
Ni miro, ni oigo.
Así te vas.

viernes, 11 de abril de 2008

Reunión

Hablabamos del aniversario del barrio, de si la murga sí o la murga no, de si la Interbarrial queria que estemos ahi, de que se merecían los pibes. El barrio cumple cuarenta años y los monoblocks parecerian tener mil doscientos. La saliva empieza a reproducirse, me llena la boca. Levanto la mirada, tenia que sortear cuatro compañeros para llegar al baño. Bajo la mirada, la saliva sigue haciendo lo suyo y la panza empieza a estallar. Me levanto, quedo en el medio del salón, siento las miradas, pido un rápido permiso. Llego al baño y estallo. Estoy mejor, vuelvo al salón. Me preguntan: y que te parece, armamos la comisión de vecinos para la semana que viene? Respondo (en un acto de sinceridad) Perdón, no estaba escuchando.

jueves, 10 de abril de 2008

Con Dolor.

La electricidad le tomó, ahora, la pantorrilla, era una sensación de calambre que no se iba nunca. Siguió caminando, ahí lo esperaban para tomar el colectivo. Cuando al fin vino, se detuvo a mirar la distancia que separaba el acceso a la puerta del piso y pensó que no lo iba a lograr, tomó valor y se dio envión para subir. Sentado parecía que la electricidad cesaba y la ventanilla se transformaba en pantalla de cine.
Cuando llegó, dos lo estaban esperando, con ganas de que no estuvieran ahí, intentó escucharlos. Mientras los escuchaba padecía la sensación de la electricidad recorriéndole el cuerpo y poco a poco se iba sintiendo inmovilizado. Ellos no se dieron cuenta y se fueron agradecidos.
Ahora vino Juan, que se vino del Paraguay por amor, que busca trabajo incansablemente y que no sabe donde vive. Monoblock 16, el último piso, será el cuarto? Le pregunta. Juan no sabe responder a eso, ni sabe decir la numeración de su departamento que comparte con este nuevo amor. Juan quiere trabajar, nada más le interesa.
Ya parte de la silla le es imposible pensar en moverse y no viene nadie más a verlo, a buscarlo. Entonces la cabeza se concentra nada más que en el dolor y la electricidad lo toma de cuerpo entero.

martes, 8 de abril de 2008

Sigue.

Como duele.
Es así de fría,

te clava,
te hunde
Te sentas a ver como se apaga,

lo disfrutas
Cómo duele
Sin embargo se saben tantas cosas, hay tantas certezas dentro de este limbo
Y sigue doliendo.
Y seguís mirando.